Yang Yu es un perdedor. Puede soportar su hambre bebiendo solo agua.
Sus padres murieron en un accidente automovilístico y perdió mucho dinero. Como resultado, fue a la universidad pero fue engañado por su novia. Desesperado, decidió suicidarse repetidamente, pero no lo consiguió.
Por fin, lanza su rabia al cielo y un trueno lo mata. Ahora, ¿podrías pensar que este pobre hombre es demasiado lamentable? Pero como todas las historias chinas de renacimiento, Yang Yu renació para ser el príncipe de la gran dinastía Xia.
Tiene todo un sistema para sostener su nueva vida, con esto a su lado, nada puede detenerlo, ni Buda ni Dios. Nada se interpone en su camino, ¡ni siquiera la muerte misma!
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